Estamos conscientes que, a nivel físico, mujeres y hombres tenemos distintas necesidades. Es por lo que quisimos hablar de estos requerimientos específicos que tienen las mujeres, estos requerimientos específicos que tienen las mujeres y que van cambiando a lo largo de los años.
Los cambios que tienen lugar en nuestro cuerpo son naturales: los esperamos; pero en muchas ocasiones no se habla de ellos, lo que logra todo un misterio a su alrededor y, más allá de eso, un desconocimiento al momento de enfrentarlos. Para irte preparando para estos cambios y acompañarte en el camino, quisimos presentarte algunos consejos muy fáciles de implementar en cada etapa de tu vida y contribuir a tu estilo de vida saludable. De esta forma te será más sencillo comprender el porqué y adoptar el hábito desde temprano.
Empecemos con los años 20: la juventud
Lo primero que podemos aconsejarte y que, por más cansino que pueda sonarte, es necesario:
- Bebe suficiente agua: la vida a esta edad es bastante movida entre la universidad, trabajos, amigos, reuniones, familia y hasta más. Lo más práctico es llevar una botella grande de agua (hay muchas opciones en cualquier supermercado). Si no estás acostumbrada ve de a poco e incluso considera opciones como saborizar el agua. Nosotros solemos usar nuestro Herbal Aloe Concentrado que le da un sabor diferente al agua y se hace más fácil de tomar.
El tomar cantidades adecuadas de agua es fundamental para mantener una buena salud. En tu cuerpo, el agua ayuda a mantener su temperatura, a eliminar desechos, al buen funcionamiento del sistema digestivo y a la lubricación de las articulaciones, entre otras. Además, mantenerte hidratado ayuda a mantener la apariencia de tu piel del rostro y cuerpo.. Este es el primer hábito más importante que debes, sí o sí, adquirir.
Pesadez, cansancio y podemos seguir… son algunos de los resultados de una mala alimentación. No solo de un mal desayuno, almuerzo o cena; sino también de una mala elección de comidas intermedias que debemos hacer durante el día y que pueden ayudarnos a evitar atracones:
- “Snacking” y no, no cualquier snack: deben ser bocadillos o refrigerios saludables, concéntrate en tener a la mano frutas, por ejemplo. ¿No te gustan? No hay problema, busca otras opciones: mezcla de frutos secos, tostadas con aguacate, yogur griego, incluso un batido proteico podría funcionar muy bien. Es cuestión de explorar opciones que te gusten y sean un aporte saludable a tu alimentación.
- Nutrientes esenciales: calcio y ácido fólico: #datocurioso tus huesos seguirán creciendo hasta mediados de los 20. Así que haz el trabajo de ayudar a mantenerlos fuertes desde ya. El yogur, la leche no láctea fortificada, el tofu firme y las sardinas son buenas fuentes de calcio. Si mediante estas opciones no alcanzas a cubrir tus requerimientos, puedes optar por suplementar también, nosotros tenemos Xtra-Cal Advanced: tabletas de calcio y vitamina D que pueden apoyar esta necesidad tan específica.
Vamos ahora a tus 30
Entre década y década los cambios empiezan a hacerse más evidentes y, si estás entrando a tus 30, ya lo debes estar notando. ¿Has escuchado que a las mujeres embarazadas se les suele suplementar ácido fólico? Es porque es fundamental en esa etapa, pero no es la única. Necesitas mantener un consumo adecuado de esta y otras vitaminas durante toda tu vida.
- Vigila las calorías: a los 30, el metabolismo comienza a hacerse más lento a medida que las mujeres pierden masa muscular. Cambia los carbohidratos refinados (p. ej., pan blanco y pastelitos) y las bebidas azucaradas por granos enteros, productos frescos y agua.
- Nutrientes esenciales: ácido fólico y proteína: cada vez más mujeres esperan hasta los 30 para tener su primer bebé. Si eres una de ellas, mantén una ingesta adecuada de ácido fólico. La masa muscular disminuye aproximadamente un 5 % por década a partir de los 30. Para ayudar a preservarla, trabaja para fortalecer tus músculos durante tu entrenamiento y consume cantidades adecuadas de proteína, lo que te ayudará a mitigar la pérdida muscular.
Los nuevos 20s: los 40
El colesterol y la presión arterial puede aumentar a medida que te acercas a la menopausia. Así como la piel es cada vez menos elástica, el colesterol y la presión arterial puede aumentar a medida que te acercas a la menopausia., Entonces:
- Ayuda a proteger el corazón: con ejercicio regular y alimentos saludables para el corazón. Las verduras de hoja verde oscuro, los tomates y otras frutas y verduras son buenas opciones. Bebe alcohol con moderación (un vaso por día) y suprime las grasas trans que pueden encontrarse en algunos alimentos procesados y fritos. También podemos recomendarte nuestro Niteworks, una fórmula especializada para contribuir a mantener la salud del corazón.
- Nutrientes esenciales: vitamina D, antioxidantes: vigila tu ingesta de vitamina D, la cual ayuda a que el cuerpo absorba calcio normalmente. También ayuda a mantener el sistema inmunitario funcionando adecuadamente y los huesos y dientes saludables. Los niveles de vitamina D comienzan a disminuir luego que las mujeres atraviesan los 40.
Los antioxidantes, como las vitaminas C y E y el beta-caroteno (precursor de la vitamina A) ayudan a prevenir o retrasar el daño celular que producen los radicales libres y que pueden contribuir al envejecimiento. Los pimientos rojos, los cítricos, las bayas, las zanahorias, las batatas y los frutos secos son buenas fuentes de antioxidantes.
Ya estamos por los 50
En las mujeres, el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas aumenta después de los 55 años, de acuerdo con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de los Estados Unidos (National Heart, Lung and Blood Institute).
- Consume más fibra: la fibra también te mantiene llena por más tiempo, lo que puede ayudar a controlar la ingesta de calorías y mantener el peso bajo control. No podemos dejar pasar la oportunidad para sugerirte que, si no estás cumpliendo con el requerimiento diario de fibra, puedes apoyarte en algún producto . Acá te dejamos nuestra Fibra Activa que proporciona 5 gramos de fibra por porción.
- Nutrientes esenciales: omega-3 y vitamina B12: estudios indican que las personas mayores pueden tener menor capacidad para absorber la vitamina B12 de los alimentos. En cualquier caso, si no alcanzas a cubrir tus ingestas diarias de esta vitamina puedes complementar con un suplemento de vitamina B12.
- Aumenta tu ingesta de ácidos grasos omega-3: encuéntralos en pescados grasos como el salmón, el cual es rico en los omega-3 conocidos como ácido eicosapentaenoico y ácido docosahexaenoico (EPA y DHA, por sus siglas en inglés). La nuez y la semilla de lino molida son ricas en ácido alfa-linolénico (ALA, por sus siglas en inglés), un ácido graso omega-3 que puede ayudar a reducir el colesterol. Nuestro Herbalifeline, son cápsulas blandas que te pueden ayudar a lograr un consumo adecuado de los ácidos grasos Omega-3, EPA y DHA
Y a partir de los 60
- Mantente activa: el nido vacío y una menor exigencia laboral te dejan más tiempo para disfrutar de la vida. Aprende un idioma nuevo, toma clases de baile, sal más con tu pareja. Hagas lo que hagas, mantén una rutina regular de ejercicios y consulta a tu médico antes de decidir hacer ejercicios cardiovasculares vigorosos y de fortalecimiento muscular.
- ¿Estás comiendo lo suficiente? los medicamentos, el metabolismo más lento, el cambio en la percepción de sabores y otros factores contribuyen a la pérdida del apetito a partir de los 60. Prueba una gama más amplia de alimentos, pero siempre enfócate en la buena nutrición. Comparte comidas con amigos.
- Nutrientes esenciales: todo lo anterior más los probióticos: la salud de nuestros intestinos cambia a medida que envejecemos. Las bacterias amigables disminuyen y nuestro intestino delgado ya no absorbe los nutrientes tan bien como antes. Agrega probióticos, que contribuyen a una flora intestinal saludable. El yogur y los alimentos fermentados como el chucrut y el kimchi son buenas fuentes.
Llevar un estilo de vida activo y saludable puede ayudarte muchísimo a llevar de mejor forma cualquier cambio. La clave es empezar hoy, para tener un mañana agradable.